El contexto actual ha restringido la enseñanza presencial, pero nos ha servido para demostrarnos que no es la única manera de hacer música, y lo que al principio fue un gran reto, hoy es un logro cumplido con la cooperación de nuestros estudiantes y maestros.
En esta nueva experiencia, nuestros profesores tuvieron que adaptarse a nuevas metodologías virtuales y a capacitarse en programas de composición, enseñanza, grabación y edición; y para nuestros estudiantes se abrió un nuevo curso de producción musical donde no sólo siguen desarrollando la técnica con su instrumento, sino que además tienen la posibilidad de crear y producir su propia música.
Cambiamos las aulas por espacios de estudio adaptados en casa, las partituras ya no estaban en una hoja sino en una pantalla, las horas de ensayo y grabación se hicieron más largas, pero a la vez más valiosas, no hubo necesidad de pisar un escenario para demostrar el talento y esfuerzo de cada uno y lo más importante, seguimos trabajando en equipo con lo que nos une como orquestina, el amor a la música.
Son nuevos tiempos, nuevos retos y la tecnología nos sirvió esta vez para seguir creciendo y darnos una lección: «nadie le gana a quien nunca se rinde» y, más allá de la música, nos quedaremos con eso por siempre.
Uno de los más gratos momentos de este grupo de artistas fue compartir por Fiestas Patrias una composición muy emotiva de la canción de Gian Marco Zignago “Hoy”.
Agradecemos por su entusiasmo a nuestros queridos estudiantes Mateo Coriat Reyes (flauta), Mathías Fernández Calle (guitarra eléctrica), Gonzalo Paitamala Molina (strings), Giovanni Bardelli Darcourt (teclado), Juan Diego Duffoo (batería) y Grecia Capellino Salas (voz solista), y a nuestros docentes de orquestina Aramis Salazar Benites y Elías Robles Orrillo.
Muy bien familia Carmelita.
